Asúmelo. Otro más que no te quiere. Se une a la interminable lista de tíos que pasan de ti. No se de que te sorprendes. Solo hay que pensar un poco. Hija mía, no vales para nada. Nadie te aguanta, ni siquiera tus mejores amigas. Entiéndelo, eres pesada, dices cosas sin sentido y no tienes nada de especial. No eres graciosa, no eres guapa, no eres simpática, no eres creativa. Solo eres una chica callada, tímida y, si me apuras, aburrida. Una sosa. Es normal que nadie muestre ni un grado de interés por ti. Nadie se preocupa por ti. Se la sudas a todo el mundo cariño. ¿Y todos esos complejos que tienes? Mira, lo primero que debes hacer es empezar a quererte un poco, tal y como eres. Que te importe una mierda lo que piensen los demás. Tal vez así las cosas comenzarían a irte mejor.
Escribir sobre ti me resulta tan complicado... ¿Cómo podría explicarte, que la realidad en tus ojos me refleja, y me asusta, y me acojonas cada vez que creo ver que realmente es a mí a quien miras y no a una imagen estereotipada de un personaje ficticio? Tú no eres ningún personaje, tú eres simplemente.... todo lo que mi corazón ha buscado desde el mismo instante en que bombeó la primera ráfaga de sangre a todo mi cuerpo. Porque cada uno de mis textos te los he escrito a ti sin haberte conocido, y sin embargo, hoy tiene nombre y apellidos. Tiene los ojos más intensos que jamás he mirado. Tiene el cuerpo y las medidas perfectas para hacerme perder el Norte, el Sur, y cualquiera de mis puntos cardinales. Tiene la boca con el nombre del pecado que cometería cada segundo de mi vida. Tú no eres veneno.. eres una droga deliciosa por la que morir de sobredosis. Eres la conjugación que une el Invierno y la Primavera. Puedo ser lo que quieras que sea pero sobre t...
Comentarios
Publicar un comentario