He llegado a un momento, en el que solo quiero esperar. Pero hay algo que me preocupa. No recuerdo como era querer tantísimo a alguien. De verdad, que por más que lo intento, no me acuerdo de cómo paso, de cómo se consigue estar tan patéticamente enamorada. ¿Acaso se me agoto el amor? ¿Acaso nadie me va a hacer sentir igual? Lo pase mal. Muy mal. Estoy mejor sin pensar en ti, eso no lo dudo. Lo que me preocupa es no volver a querer tanto a alguien. ¿He sentido algo parecido desde entonces? Creo que sí. Pero sigo sin recordar como es. ¿Y si no vuelvo a notarlo nunca? Tengo miedo de vivir sin esa emoción. Tal vez sea el miedo de que algo así vuelva a pasar. Tal vez. O también, puede que me haya hartado del amor, sin ni siquiera haberlo vivido o saber como es.
Escribir sobre ti me resulta tan complicado... ¿Cómo podría explicarte, que la realidad en tus ojos me refleja, y me asusta, y me acojonas cada vez que creo ver que realmente es a mí a quien miras y no a una imagen estereotipada de un personaje ficticio? Tú no eres ningún personaje, tú eres simplemente.... todo lo que mi corazón ha buscado desde el mismo instante en que bombeó la primera ráfaga de sangre a todo mi cuerpo. Porque cada uno de mis textos te los he escrito a ti sin haberte conocido, y sin embargo, hoy tiene nombre y apellidos. Tiene los ojos más intensos que jamás he mirado. Tiene el cuerpo y las medidas perfectas para hacerme perder el Norte, el Sur, y cualquiera de mis puntos cardinales. Tiene la boca con el nombre del pecado que cometería cada segundo de mi vida. Tú no eres veneno.. eres una droga deliciosa por la que morir de sobredosis. Eres la conjugación que une el Invierno y la Primavera. Puedo ser lo que quieras que sea pero sobre t...
Comentarios
Publicar un comentario