Estabas dispuesto a enseñarme a amar porque yo de eso no tenia ni idea, y no porque no quisiese; es que siempre había amado más de la cuenta y a veces solo hay que querer lo justo para no llenarte de pena. Y tal vez fue eso lo que paso, mataron y apuñalaron tan fuerte mi amor y a ver quien es luego el que pasa a barrer este desastre. Y es que por amor nos convertimos en todo lo que siempre hemos odiado, nos empieza a dar por hablar de la vida sin tener aún construidos los cimientos del presente, y no sabes hacia donde vamos. Y al final pasa lo de siempre, uno huye del otro, y siempre huye el que menos quiere y el que más quiere es el que sufre. Y yo no se querer lo justo.
Escribir sobre ti me resulta tan complicado... ¿Cómo podría explicarte, que la realidad en tus ojos me refleja, y me asusta, y me acojonas cada vez que creo ver que realmente es a mí a quien miras y no a una imagen estereotipada de un personaje ficticio? Tú no eres ningún personaje, tú eres simplemente.... todo lo que mi corazón ha buscado desde el mismo instante en que bombeó la primera ráfaga de sangre a todo mi cuerpo. Porque cada uno de mis textos te los he escrito a ti sin haberte conocido, y sin embargo, hoy tiene nombre y apellidos. Tiene los ojos más intensos que jamás he mirado. Tiene el cuerpo y las medidas perfectas para hacerme perder el Norte, el Sur, y cualquiera de mis puntos cardinales. Tiene la boca con el nombre del pecado que cometería cada segundo de mi vida. Tú no eres veneno.. eres una droga deliciosa por la que morir de sobredosis. Eres la conjugación que une el Invierno y la Primavera. Puedo ser lo que quieras que sea pero sobre t...
Comentarios
Publicar un comentario