Todos tenemos un lado cursi, solo que algunos saben esconderlo mejor que otros. Una sonrisa al teléfono. Un te quiero. Un beso. ¿A quien no le gusta que le quieran? Incluso el que tiene miedo de sufrir, quiere un poco de amor en su vida. Es tan simple como eso. Todos queremos lo mismo. Alguien que nos entienda, que nos complete, alguien con el que vivir el resto de nuestras vidas. Alguien que nos haga feliz en cualquier parte, rincón y lugar del mundo. Alguien que simplemente nos quiera tal y como somos, que se haya enamorado de nosotros, que quiera una vida a nuestro lado. Todos queremos lo mismo.
Escribir sobre ti me resulta tan complicado... ¿Cómo podría explicarte, que la realidad en tus ojos me refleja, y me asusta, y me acojonas cada vez que creo ver que realmente es a mí a quien miras y no a una imagen estereotipada de un personaje ficticio? Tú no eres ningún personaje, tú eres simplemente.... todo lo que mi corazón ha buscado desde el mismo instante en que bombeó la primera ráfaga de sangre a todo mi cuerpo. Porque cada uno de mis textos te los he escrito a ti sin haberte conocido, y sin embargo, hoy tiene nombre y apellidos. Tiene los ojos más intensos que jamás he mirado. Tiene el cuerpo y las medidas perfectas para hacerme perder el Norte, el Sur, y cualquiera de mis puntos cardinales. Tiene la boca con el nombre del pecado que cometería cada segundo de mi vida. Tú no eres veneno.. eres una droga deliciosa por la que morir de sobredosis. Eres la conjugación que une el Invierno y la Primavera. Puedo ser lo que quieras que sea pero sobre t...
Comentarios
Publicar un comentario