Solo el saber que existes ya hace que te odie. Te odio por como me miras, por como me hablas, por como te preocupas. Te odio por tus ojos, por tu voz, por tu sonrisa, porque me duele escuchar como te ríes, porque me duele ver que te acuerdas de mi... que te importo. Te odio porque te as metido en mi mundo y ahora no te puedo sacar, porque antes podía vivir sin ti, porque no necesitaba verte, porque me daba igual donde estuvieras. Te odio porque me haces sentir bien y no puedo decírtelo. Te odio porque enciendes mi corazón y apagas mis palabras. Te odio porque desearía no conocerte, te odio por ti lloro, por ti rió, por ti siento. Te odio porque se que no te tengo, porque se que no me quieres... porque se que me conoces y que sabes lo que por ti siento...por eso te odio porque lo sabes y no haces nada. Te odio porque no puedo decirte lo que ya sabes. Que te odio porque te quiero.
Escribir sobre ti me resulta tan complicado... ¿Cómo podría explicarte, que la realidad en tus ojos me refleja, y me asusta, y me acojonas cada vez que creo ver que realmente es a mí a quien miras y no a una imagen estereotipada de un personaje ficticio? Tú no eres ningún personaje, tú eres simplemente.... todo lo que mi corazón ha buscado desde el mismo instante en que bombeó la primera ráfaga de sangre a todo mi cuerpo. Porque cada uno de mis textos te los he escrito a ti sin haberte conocido, y sin embargo, hoy tiene nombre y apellidos. Tiene los ojos más intensos que jamás he mirado. Tiene el cuerpo y las medidas perfectas para hacerme perder el Norte, el Sur, y cualquiera de mis puntos cardinales. Tiene la boca con el nombre del pecado que cometería cada segundo de mi vida. Tú no eres veneno.. eres una droga deliciosa por la que morir de sobredosis. Eres la conjugación que une el Invierno y la Primavera. Puedo ser lo que quieras que sea pero sobre t...
Comentarios
Publicar un comentario